Constantes apagones incrementan ventas de plantas eléctricas

La situación que a diario se vive en el país en cuanto a las fallas en el servicio de la electricidad agobia a los venezolanos, quienes se quejan de las consecuencias arrojadas por los constantes apagones que se manejan sin control y previo aviso, y que al parecer responde a un cronograma de racionamiento de electricidad. Tanto hogares como instituciones de cualquier índole sirven de escenario para reflejar lo que se ha nombrado ahorro de energía.
En los establecimientos comerciales que venden plantas eléctricas se evidencia un importante incremento en la demanda, la cual alcanza un 80 por ciento de compras de estos aparatos, así como los protectores, reguladores de computadoras y hasta lámparas portátiles.Pedro Meléndez, vendedor en una reconocida ferretería de Cabimas, puntualizó que desde el comienzo de los apagones la gente no deja de manifestar su preocupación, por lo que se mantienen en constante búsqueda de soluciones.
“El aumento de las ventas de las plantas eléctricas es sumamente notorio, podemos hablar de un 80 y 90 por ciento, porque tanto comerciantes como residenciales han venido a adquirirla alguna según sus necesidades”.
Enfatizó el vendedor que dichos aparatos tienen unos costos que oscilan entre 600 hasta 8 mil Bs.F, según sea la capacidad de la misma.
“Anteriormente, parecía que la gente ni conocía las plantas eléctricas, ahora podemos decir que vendemos hasta veinte semanales. La gente trata de resolver este problema para garantizar su comodidad y en otros casos para proteger la estabilidad de sus negocios”.
Asimismo, Carlos Rojas, gerente de otra ferretería de la localidad, aseveró que a pesar de no vender estos aparatos, constantemente los clientes llegan buscándolos como medida de resguardo ante los apagones, lo que a su entender le permite hablar de un importante incremento.
“Aquí lo que verdaderamente se está vendiendo con mucha regularidad son los protectores de los artefactos eléctricos, sin embargo muchas veces estos suelen quemarse también debido a la frecuencia de las fallas. Realmente la preocupación del colectivo se expresa diario y es indispensable que se llegue a una solución efectiva, porque de lo contraria las pérdidas serán cada vez más altas y el malestar social aún mayor”.