sábado, 6 de febrero de 2010

Víctimas del hampa en La Rosa temen denunciar por temor a venganzas

Los habitantes se estremecen cada vez que un delincuente cae preso, pues inmediatamente los miembros de su banda, familiares o compinches piensan que alguien denunció y comienzan a amedrentarlos.
Como ciegos, sordos y mudos se ven obligados a actuar los habitantes de la populosa parroquia La Rosa, cada vez que el hampa hace de las suyas. El temor a denunciar ante los organismos de seguridad cuando son víctimas de abusos y robos, silencia a las familias.
Menores de edad han resultado heridos durante enfrentamientos registrados en la zona, sin embargo, los cuerpos policiales muchas veces desconocen estas situaciones o no pueden proceder formalmente, pues nadie se atreve a denunciar para evitar venganzas.
El miedo a las represalias lleva además a las víctimas a evadir la presencia de periodistas que buscan abordar el tema de la delincuencia, pues aseguran que si los delincuentes sospechan que se está filtrando información pueden perder la vida.Una vocera de la comunidad que prefirió no identificarse manifestó que en la zona abundan las ventas de droga, y que los consumidores suelen robar artefactos y dinero para cambiarlo por sustancias estupefacientes modalidad conocida como “trueque”.
De igual modo, un vecino de La Rosa, señaló que los habitantes se estremecen cada vez que un delincuente cae preso, pues inmediatamente los miembros de su banda, familiares o compinches piensan que alguien denunció y comienzan a amedrentarlos.
Ante esta realidad el llamado de los cuerpos de seguridad está dirigido a formular denuncias, comprometiéndose a mantener la información suministrada de forma confidencial.
Jhonny Bastidas, comandante de Policabimas, aseguró que en diciembre de 2008 dieron un duro golpe al hampa en la parroquia La Rosa al desarticular la temida Mega Banda, integrada mayormente por jóvenes menores de 25 años.Indicó que parte de los forajidos cayeron abatidos, otros se encuentran tras las rejas, mientras que una minoría huyó hacia otros estados y municipios.
Explicó que en diciembre de 2009 se registraron enfrentamientos entre algunos miembros de esta banda extinguida, resultando detenidos cinco ciudadanos, dos de los cuales presentaban porte ilícito de armas.
De igual modo, apuntó que tienen identificados dos sujetos que habitan en La Rosa, conocidos como El Anyelo y El Goajiro, ambos presuntamente implicados en la muerte del aspirante a Policabimas Nixon Rivero.Acción Policial El comandante Bastidas dijo además que en la zona se realizan patrullajes constantes las 24 horas, acción que es complementada con operativos especiales durante las horas de racionamiento eléctrico.
Además recalcó que siempre hay un oficial de guardia en el módulo de Policabimas ubicado en la avenida Principal de La Rosa, dispuesto a atender las denuncias de las comunidades.
“Necesitamos que los ciudadanos denuncien cuando detecten ventas de droga o sepan el lugar donde se ocultan los antisociales, pues no podemos actuar sin temer las ordenes de allanamiento.
El trabajo debe ser mancomunado entre los vecinos y los funcionario, de otra manera será más difícil atacar el hampa”.Por su parte, el comisario José Romero, jefe del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, subdelegación Cabimas, aseveró que cualquier dato suministrado por la comunidad es importante a la hora de emprender las investigaciones dirigidas a combatir el robo y hurto de vehículos, los asesinatos y el microtráfico de droga.

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